Frasco de reactivo, ámbar, 30 ml, boca estrecha: Perfecto para Almacenamiento de Productos Químicos Sensibles a la Luz
El Frasco de reactivo, ámbar, 30 ml, boca estrecha es una solución ideal para el almacenamiento seguro de productos químicos, líquidos y polvos que son sensibles a la luz. Su color ámbar ofrece una protección eficaz contra la exposición a la luz, ayudando a preservar la estabilidad y eficacia de los contenidos. Este diseño es especialmente crucial para mantener la integridad de sustancias que pueden degradarse o perder sus propiedades cuando están expuestas a la luz.
Esta botella está construida con plástico rígido de polietileno de alta densidad (HDPE), un material reconocido por su durabilidad y resistencia superior. El HDPE proporciona una excelente resistencia química y es altamente resistente a los rayos UV, lo que asegura que la botella mantenga su integridad incluso en condiciones de exposición prolongada a la luz. Además, esta construcción ofrece una resistencia sobresaliente a una variedad de sustancias químicas, incluyendo ácidos, alcoholes, álcalis, aldehídos e hidrocarburos, garantizando que la botella pueda manejar diversas aplicaciones sin deteriorarse.
El diseño de la botella incluye un cuello estrecho, que facilita un vertido preciso y controlado del contenido. Esta característica es fundamental en entornos de laboratorio y científicos donde la precisión es esencial. Además, la botella está equipada con un tapón de rosca a prueba de fugas con sello, que proporciona un cierre hermético, evitando derrames accidentales y protegiendo el contenido de contaminaciones externas.
Diseñada para laboratirios util para aulas y uso domestico
Aunque esta botella está diseñada principalmente para uso en laboratorios profesionales, su versatilidad la convierte en una excelente opción para aulas de ciencias y uso doméstico. Tanto la botella como el tapón son aptos para el lavavajillas, recomendándose colocarlos en la rejilla superior para preservar su calidad. Con unas dimensiones compactas de 2,4 pulgadas de alto y 1,4 pulgadas de diámetro, esta botella de 30 ml es una herramienta práctica y eficaz para el almacenamiento de productos sensibles a la luz. Su diseño robusto y funcionalidad la hacen indispensable para diversas aplicaciones.
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